EUROPA PRESS
6 junio 2011
El 68% de los
españoles pone en riesgo su salud cuando intenta perder peso por su cuenta
El 68 por ciento de los españoles pone en riesgo su salud
cuando decide ponerse a dieta e intenta perder peso por su cuenta, sin tener en
cuenta el análisis metabólico y las recomendaciones de los especialistas en
Nutrición. Así lo ha puesto de manifiesto una encuesta realizada por Nutrición Center sobre una muestra de 6.544 personas.
En
este sentido, los especialistas insisten en que el plan nutricional para perder
peso se elabora de acuerdo a las condiciones específicas de cada individuo. De
hecho, antes de planificar una dieta se realiza un estudio metabólico previo
para determinar si se necesita perder kilos de grasa, si se retienen líquidos,
etc.
"Conocer
estos parámetros es fundamental para que el nutricionista ajuste las
recomendaciones a las necesidades individuales de cada persona", indican
los expertos de Nutrición Center. Además, se aconseja
repetir estos estudios semanalmente para estudiar la evolución y comprobar que
se está haciendo de manera satisfactoria y que "el peso perdido
corresponde a grasa y no a masa muscular".
En
cuanto al tipo de alimentación, los nutricionistas recuerdan que es "muy
importante saber qué, cuánto, cuándo y cómo comer, ya que una dieta
excesivamente restrictiva puede provocar carencias nutricionales". Algo
que suele ser muy habitual en personas que deciden perder peso por su cuenta es
saltarse comidas o realizar largas jornadas de ayuno. Estas prácticas
"ralentizan el metabolismo y suelen ocasionar un efecto yoyó, además de
poner en peligro su salud, pues no cubren las necesidades básicas y someten al
organismo a un nivel de estrés severo".
Por
tanto, la mejor opción es seguir las recomendaciones del nutricionista, entre
las que se encuentra recortar el consumo de grasas y azúcares, cocinar con poca
grasa (a la plancha, al vapor, cocción, etc.), ingerir verduras tanto en el
almuerzo como en la cena, realizar un desayuno completo, comer fruta a media mañana
así como en la merienda, etc.
Asimismo,
incrementar la actividad física diaria es una buena medida a tener en cuenta a
la hora de controlar el peso, mejorar la salud cardiovascular y evitar
recuperar el peso perdido. Caminar al menos media hora al día, realizar
bicicleta o natación son prácticas al alcance de todos que pueden ser de gran
ayuda para el mantenimiento y mejora de la salud.